Tras la reunión del otro día con la empresa, hoy tocaba el turno de evaluar lo que dio de sí. Realmente el análisis no puede ser más claro, dado que no hubo ninguna variación respecto a lo ya presentado, salvo alguna exigencia extra, y es que dicha propuesta ni siquiera puede ser digna de consideración ni sirve como base para ninguna negociación, dado que solo exige sacrificios sin ofrecer ni la más mínima contrapartida a cambio, ni garantías, ni planes de futuro ni absolutamente nada.
Una vez que los grupos hemos coincidido en ésto, se nos plantea la disyuntiva de ver qué se hace para poder empezar a negociar, ya que la empresa ha manifestado su intención de no dar ningún paso y esperar las propuestas del comité, ignorando por completo la plataforma que se le presentó por parte de los trabajadores. Si nosotros no entramos en la suya y ellos no entran en la nuestra, se puede dar una situación de bloqueo incluso antes de empezar a negociar.
Así que lo que se ha decidido ha sido tratar de buscar los puntos donde se pueda empezar a hablar, dejando de lado la cuestión salarial. Es decir, aparcar de momento el tema de los salarios y tratar de llegar a acuerdos en los otros puntos fundamentales, especialmente la no aplicación de la reforma laboral, la vigencia y el mantenimiento del empleo. Si se puede avanzar en estos temas, en una segunda fase se abordarían los puntos económicos.
Por otro lado, como otros años, el comité ha acordado por unanimidad solicitar a la empresa la compra de un kilómetro de la Korrika que llega a Iruñerria la segunda quincena de marzo. Esta semana nos van a pasar el recorrido con los horarios y precios del mismo y elegiremos alguno cerca de Iruña. También intentaremos llevar petos y pins a la fábrica para el que quiera colaborar con la Korrika.